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Se realizó con éxito en la sede del Centro Cultural Rawson un Taller sobre “Bio-plásticos: su rol en la gestión de los Residuos Sólidos Urbanos”, organizado por el Ministerio de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable de la Provincia.
La actividad fue abierta por el ministro José María Musmeci quien destacó “los esfuerzos realizados desde el estado provincial para contribuir a una mejor gestión de los residuos sólidos urbanos, generando espacios de formación, intercambio y conocimiento de nuevas alternativas que apunten a la biodegradabilidad y compostabilidad”.
Musmeci agradeció la presencia de la Ing. Noemí Cermesoni de la firma TriTellus Srl por “compartir el conocimiento sobre estas temáticas y al Dir. de la Planta de Tratamiento GIRSU Esquel,  Raúl Paez,  por mostrar la experiencia desarrollada hasta el momento”.
Noemi Cermesoni
La ingeniera Noemi Cermesoni indicó que “los bioplásticos son una materia prima muy nueva y que está muy relacionada con la gestión de los residuos sólidos urbanos ya que contienen material renovable dentro de su composición y una gran ventaja al ser bio-degradables en compostaje”.
Agregó que “cuando los bioplasticos terminan su vida en el compostaje se biodegradan en un tiempo máximo de 180 días y esto está certificado internacionalmente por organismos independientes”.
Aseguro que “la gran ventaja de las bolsas y otros productos que se hacen con bioplásticos es que utilizan la misma tecnología de la industria plástica, sin hacer ningún tipo de cambios, más que cambiar la materia prima y con ahorro energético porque el material se trabaja a mucho menos temperatura”.
En relación al plan de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos (GIRSU) Cermesoni sostuvo que “como país casi la mitad de los residuos que generamos son orgánicos, con lo cual es muy importante pensar que podemos hacer con este residuo para recuperarlo. Hay dos formas, una es el compostaje y otra el biogás. Las bolsas que se fabrican en bioplasticos se degradan de las dos maneras, con lo cual son muy útiles para la gestión de los residuos sólidos urbanos”.
Finalmente precisó que “una vez que se establece el circuito esa bolsa va directamente a compostaje, no tiene que pasar por ninguna cinta para ser abierta, porque la bolsa y el contenido se van a biodegradar con el mismo ritmo, generando un ahorro muy grande tanto en logística como en trabajo”.