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Los ataques de gaviotas a ejemplares de Ballena Franca Austral disminuyeron sensiblemente entre el año 2012 y el 2014 con motivo de la implementación del Plan de Acción Provincial que llevan adelante conjuntamente el Ministerio de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable, el Ministerio de Desarrollo Territorial y Sectores Productivos, la Secretaría de Turísmo y Áreas Protegidas de Chubut, con la asistencia de investigadores del Centro Nacional Patagónico (CENPAT).

Así fue informado este martes en una reunión de difusión de los Resultados Temporada 2014, con la participación de autoridades provinciales, de la municipios de Puerto Madryn y Puerto Pirámides, Prefectura Naval Argentina,  y organizaciones de la sociedad civil vinculadas con la temática.

La reunión se llevó adelante en el edificio del Centro Tecnológico Pesquero, con la presencia del Ministro de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable, José María Musmeci; el Subsecrertario de Áreas Protegidas, Victor Fratto y la Directora de Fauna y Flora de la Provincia, Silvana Montanelli; por parte de la Provincia.

Además estuvieron presentes  personal de Prefectura Naval Argentina,  representantes del área de Turismo de la Municipalidad de Puerto Madryn, la Secretaría de Ambiente de Puerto Pirámides, la Fundación Patagonia Natural, WEF, el Instituto de Conservación de Ballenas, Programa de Monitoreo Sanitario, ARCOHBA y empresas prestadoras de avistajes de Puerto Pirámides.

Conclusiones

El Dr. Marcelo Bertellotti, investigador del Cenpat-CONICET, quien lidera el proyecto,  informó en la reunión que el resultado neto es una disminución de los ataques año tras año, desde el 2012 hasta el 2014. Se vio que en el año 2012 el porcentaje de avistajes con ataque de gaviota a ballena fue del 37%, en el 2013 del 31% y en el 2014 del 27%.

Según el investigador el proyecto de “Elminación Selectiva de Gaviotas Atacantes de Ballenas: Análisis de Factibilidad del Método y Monitoreo de la Tasa de Ataque” tuvo hasta el momento resultados positivos debido a la continuidad en el esfuerzo de descaste (matanza selectiva de las gaviotas que están atacando a una ballena)  que logró disminuir la frecuencia de ataques, a la vez que corrió el pico de ataque hacia el final de la temporada de ballenas.

Según Bertellotti, la disminución observada en 2014, se debe a dos factores clave: los dos años previos donde ya se han hecho descastes; y  el haber concentrado los esfuerzos de descaste de gaviotas en 3 meses (agosto-octubre) y hacerlo de manera constante durante este período.

Además el investigador explicó que el descaste no sólo es de interés turístico por la calidad de la experiencia que vive el turista, sino sobre todo por las implicancias sanitarias para la población de ballenas, ya que las heridas que producen los picotazos se vuelven sitios de ingreso de agentes patógenos. Por otra parte los cambios en el comportamiento que se observan en las ballenas para evitar el ataque que, implican un mayor gasto energético en desmedro de las actividades naturales como son el amamantamiento.

En la reunión se evidenció la necesidad de realizar un censo de las poblaciones de gaviotas del sector Península Valdés y adyacentes, como así también un estudio de metapoblación de esta especie, y avanzar en el mejoramiento de la gestión de los residuos pesqueros, una de las principales fuentes de alimentación de las poblaciones de gaviotas de la zona.